El “Libro Blanco de la Atención Temprana” (2000), es el documento por excelencia que nos guía en nuestra tarea como profesionales de la atención temprana, definiendo como tal:
“El conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0-6 años, a la familia y al entorno, que tienen como objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastorno en su desarrollo o que tienen el riesgo de padecerlos. Estas intervenciones deben considerar la globalidad del niño, y han de ser planificadas por equipos de profesionales de orientación interdisciplinar”.
El profesional especializado en atención temprana llevará a cabo con el niño sesiones de sesenta minutos, desarrollando una intervención global, integral e individualizada, acorde a sus características y sus posibilidades, pero siempre intentando que el niño alcance su máximo desarrollo posible.
La labor del profesional asignado será llevada a cabo bajo las directrices de intervención consensuadas por el equipo interdisciplinar, de manera que supondrá un trabajo psicopedagógico lleno de propuestas variadas, ofreciendo resultados muy positivos y eficaces.
Además, la cámara Gessell por un lado permitirá a los padres observar, sin ser vistos, el proceso de intervención que el terapeuta está llevando a cabo con el niño y sus procesos paso a paso, aprendiendo a la vez estrategias de actuación, y por otro lado, nos da la posibilidad de que los profesionales puedan observar como interactúan padres e hijo, permitiendo corregir actuaciones equivocadas, orientándolos en posibles alternativas más correctas y efectivas.